UPyD es la que más difícil me
resulta encasillar. Algunos de sus miembros gustan de definirse como liberal
progresistas, entendiendo liberal en un sentido social o cultural más que
económico e incluso político. Sin embargo, leyendo su programa lo que primero
salta a la vista es su postura crítica ante lo que consideran excesos del
Estado de las Autonomías, para cuya corrección proponen desde medidas
prácticas, como revisar determinadas competencias, financiación, etc., hasta
cuestiones tales como borrar de la Constitución toda referencia a derechos
históricos o vocablos como nacionalidades o regiones. En el conflicto de la
lengua ya se situaron claramente frente al catalanismo. El asunto de la
organización, o mejor, reorganización territorial es lo que le da más
personalidad, y tiene el mérito de que lo expresan con claridad y convicción,
al contrario de lo que ocurre en otras formaciones (casi todas), que tienen una
notable ambigüedad ante el problema y se acomodan fácilmente a las
circunstancias cambiantes, cualesquiera que sean, y no precisamente por
flexibilidad sino por indefinición. Su progresismo queda manifiesto en la
posición favorable ante cuestiones sociales problemáticas y muy de actualidad
tales como la muerte digna, aborto u otras, y económicas al elegir la acción
sobre los ingresos más que sobre el gasto para hacer frente a la crisis. Ante
la cuestión energética propugnan la cautela ante la nuclear, como no podía ser
de otro modo, pero no optan por su abandono. Cuenta en su haber con una líder
de larga experiencia política (Rosa Díez), aunque para algunos, dadas las
circunstancias, pueda ser un hándicap.
EQUO es una formación
absolutamente novedosa y ha hecho esfuerzos por constituirse con métodos
innegablemente democráticos y con visos asamblearios, no en balde nacía a la
vida política mientras acampaban los indignados en las plazas públicas. Un
guiño que muchos jóvenes sabrán captar, como el hecho de que su líder no ha
sido político, aunque se fogueó durante años en la lucha por el medio ambiente
(López de Uralde). Ecologismo de izquierdas o izquierda ecologista es su
definición. La aproximación entre los ecologistas y la izquierda tiene ya
historia, pero éste es un intento de fusión que se ha puesto de manifiesto en
su programa y hasta en su composición humana, quizás con un poco de más peso en
el ecologismo. Nítidamente de izquierdas, su programa contiene desde la
reclamación de una nueva ley de la memoria histórica hasta la constitución de
una banca estatal con las antiguas cajas, y, por supuesto, afrontar la crisis
con una política de ingresos y de estímulo de la demanda y no con la
restricción del gasto. Territorialmente, también en clara sintonía con otras
izquierdas, se pronuncia por superar el Estado de las autonomías mediante el
federalismo. Por supuesto reniegan del uso de la energía atómica, de la que
requiere combustibles fósiles y de la construcción de nuevos embalses y
prometen la elaboración de un plan que ordene el consumo y la producción energéticas
sostenibles, así como la racionalización del regadío.
Ambas se pronuncian por una
reforma en profundidad de la ley electoral con un nuevo texto que cambie
circunscripciones, añada una estatal para la adjudicación de restos, modifique
el carácter de las listas y abandone la ley d’Hont por otra más proporcional (Hare), evitando el lamentable
espectáculo actual (IU requiere casi 500.000 votos para conseguir un diputado,
más de 300.000 UPyD y el PNV sólo
51.000, o en torno a 60.000 PSOE y PP). Esta última cuestión tiene además una
clara repercusión en la arquitectura política del país al limitar el
desorbitado poder de los nacionalismos en el Congreso de los Diputados y, por
tanto, su influencia sobre el ejecutivo, abriendo la posibilidad de que
trasladen al Senado parte de su acción política, con lo que esta cámara podría
empezar a tener sentido.
Independientemente de la
simpatía o rechazo que despierten, pienso yo que estaría muy bien que UPyD
consiguiera grupo parlamentario, como le pronostican las encuestas, y que EQUO
inaugurara representación en el Congreso.
3 comentarios:
Hay algunos que ha salido "escupidos" (a toda velocidad) de UPyD, quejándose de las actitudes despóticas de la "jefa". Salud(os).
La Economía Evolutiva en ciernes !
Mark de Zabaleta
Me parece bien que hayan partidos nuevos
Publicar un comentario